El rendimiento en WordPress es crucial para la experiencia del usuario y el SEO. Un sitio rápido mejora la retención de visitantes y el posicionamiento en buscadores. La optimización incluye múltiples aspectos: configuración del servidor (Apache, Nginx), uso de plugins de caché, minificación de CSS/JS, optimización de imágenes y consultas a la base de datos.
En entornos compartidos, la optimización requiere estrategias específicas para no afectar otros sitios. Técnicas como el lazy loading, preloading de recursos y uso de CDNs pueden marcar una diferencia significativa. Para sitios con mucho tráfico o bases de datos grandes, soluciones como caché a nivel de objeto o servidores dedicados ofrecen mejor escalabilidad.
El rendimiento también afecta a la seguridad, ya que sitios optimizados son menos vulnerables a ataques de denegación de servicio. Monitorear constantemente el tiempo de carga y realizar ajustes es parte del mantenimiento esencial de cualquier sitio WordPress.